- No piensas hacer nada al respecto? * La miraba fijamente mientras se acercaba a ella.*
- En este momento no puedo... no podría enfrentarle. * Sentada desde el rincón de la habitación, tratando de evitar mirar los ojos de su amiga, miraba hacia el piso.*
- Puede que el tiempo no sea un aliado para ti ¿lo sabes verdad? * La tomo de los hombros, como en un intento de que ella se diera cuenta que eso podría significar el término de esa relación. Una relación que desde un comienzo había estado llena de obstáculos.*
- Pero ¿que puedo hacer?. *Viéndose acorralada ante las cosas que, ella misma, ya una vez se había preguntado. Ella sabía muy bien que necesitaba armarse de valor y hacer un esfuerzo, un esfuerzo que le causaba temor, incluso pavor.*
- Lo que este a tu alcance. * Suspiro profundamente, soltó los hombros de ella y camino hacia la puerta.*
- No hay nada que pueda yo hacer, si no aparece... quizás simplemente no quiere verme... no quiere saber de mi. * Su personalidad como siempre, pesimista, le hacia pensar en lo peor. Se tiro en su cama, abrazo la almohada y se limito a observar el paisaje de su ventana.*
Mientras Liam salía de la habitación, está seguía inmiscuida en sus propios pensamientos, pensamientos que solo lograban ponerla peor. Llevaba días en que nada le parecía divertido, en que solo deseaba saber de esa persona, intentando contactarle, sin éxito. Sus amigos trataban de hacerle pasar ratos agradables, pero ella simplemente no ponía de su parte. Después de varios días, quizás semanas volvió a encontrarse con una persona que había conocido unos meses atrás. Y con el paso de los días comenzaron a llevarse cada vez mejor, a pesar de que no dejaba de pensar en esa persona, poco a poco, volvía a sentirse contenta y anhelando las platicas que sostenía.
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